Descripción enviada por el equipo del proyecto. Un nuevo intento de interpretar las normas urbanas para evitar el síndrome de “la villa urbana”. En un pacifico escenario en el antiguo pueblo Markusevec, que creció en los últimos años para formar parte de la ciudad, el cliente encargó un asentamiento residencial de clase media.
El trazado urbano general respeta los caminos existentes que llevan hacia el centro del pueblo. Las unidades de vivienda se disponen a lo largo de estas líneas. Un parque público se establece como punto terminal en el otro extremo de la ruta.
Considerando la escala rural como punto de partida, la tipología de casas pareadas se reorganiza en agrupaciones planas, introvertidas y densas.
Los lotes no son regulares, pero fueron adaptados para alcanzar un área mínima de 600 m2. El recorte en la planta del segundo nivel responde a la norma de un área máxima de 75 % de la planta tipo y son diferentes en cada casa.
Estacionamiento, patios, terrazas y vivienda están contenidas dentro de un perímetro claro, con un esfuerzo en mantener la calidad de la vivienda en una agrupación mas congestionada y con menor terreno. El nivel de suelo actúa como un frente para las 8 unidades por agrupación que tienen uno o dos departamentos.
La parte superior está revestida de madera en su interior, otorgando un ambiente amigable. Por fuera se revisten en aluminio para proteger del clima.
Siguiendo la topografía, las agrupaciones que enfrentan la calle principal se sitúan a nivel de suelo, mientras que las otras dos que enfrentan el canal, se bajan un nivel.
Las terrazas estaban diseñadas para ser equipadas con parrillas prefabricadas según un diseño de la misma oficina, con el fin de generar un estilo de vida Suburbano / post-rural, lo que finalmente fue rechazado por el cliente.